Pareciera que las mujeres nacemos marcadas por una paradoja emocional, en la que se combina la falta del autocontrol con la fuerza interior que nos empuja a mover montañas y lograr imposibles. Somos el sostén y a la vez la fragilidad en nuestras relaciones personales. Somos las más eficaces y eficientes, con la mayor fuerza de empuje para avanzar a pesar de cualquier obstáculo y al mismo tiempo nos detenemos en dudas sobre nuestras capacidades...
El autocontrol en nosotras, es y será un misterio cómo y cuándo se hace presente en nuestra personalidad, pero en el momento en que descubrimos que está y aprendemos a dominar esta herramienta, combinada con nuestra obstinada fuerza de salir adelante y progresar, nos convierte decididamente en el "sexo fuerte".
En esta oportunidad, vamos a transitar por una serie de tips destinados a conocer más sobre los puntos de nuestra personalidad sobre los que tenemos que trabajar para alcanzar esta poderosa habilidad: El Auto-Control.
El autocontrol podría definirse como la capacidad consciente de regular los impulsos de manera voluntaria, con el objetivo de alcanzar un mayor equilibrio personal y relacional. Una persona con autocontrol puede manejar sus emociones y regular su comportamiento. El autocontrol es, por otra parte, una herramienta que permite, en momentos de crisis, distinguir entre lo más importante (aquello que perdurará) y lo que no es tan relevante (lo pasajero).
Uno de los principales puntos a tomar consciencia es la Inteligencia Emocional. Según Daniel Goleman los principales componentes de la inteligencia emocional son:
- Autoconocimiento emocional (o conciencia de uno mismo) : Se refiere al conocimiento de nuestras propias emociones y cómo nos afectan. En muy importante conocer el modo en el que nuestro estado de animo influye en nuestro comportamiento, cuales son nuestras virtuades y nuestros puntos débiles. Nos sorprenderíamos al saber cuan poco sabemos de nosotros mismos.
- Autocontrol emocional (o autorregulación) : El autocontrol nos permite no dejarnos llevar por los sentimientos del momento. Es saber reconocer que es pasajero en una crisis y qué perdura. Es posible que nos enfademos con nuestra pareja, pero si nos dejasemos siempre llevar por el calor del momento estariamos continuamente actuando irresponsablemente y luego pidiendo perdon por ello.
- Automotivación : Dirigir las emociones hacia un objetivo nos permite mantener la motivación y fijar nuestra atención en las metas en lugar de en los obstaculos. En esto es necesaria cieta dosis de optimismo e iniciativa, de forma que seamos emprendedores y actuemos de forma positiva ante los contratiempos.
- Reconocimiento de emociones ajenas (o empatía) : Las relaciones sociales se basan muchas veces en saber interpretar las señales que los demás emiten de forma inconsciente y que a menudo son no verbales. El reconocer las emociones ajenas, aquello que los demás sienten y que se puede expresar por la expresión de la cara, por un gesto, por una mala contestación, nos puede ayudar a establecer lazos mas reales y duraderos con las personas de nuestro entorno. No en vano, el reconocer las emociones ajenas es el primer paso para entenderlas e identificarnos con ellas.
- Relaciones interpersonales (o habilidades sociales) : Cualquiera puede darse cuenta de que una buena relacion con los demás es una de las cosas más importantes para nuestras vidas y para nuestro trabajo. Y no solo tratar a los que nos parecen simpaticos, a nuestros, amigos, a nuestra familia. Sino saber tratar también exitosamente con aquellos que están en una posición superior, con nuestros jefes, con nuestros enemigos...
Hasta el próximo Post
Romina Larrondo